Artículo publicado en «El Económico» (enlaces y gráficos no forman parte del artículo original)
Situación de las bolsas europeas
Tras unos meses veraniegos en los que las bolsas europeas han presentado caídas en un entorno de gran volatilidad, es bueno recordar los puntos de soporte y resistencia.
Vivimos tiempos donde los ruidos geopolíticos globales y particulares de la zona euro están en máximos: la Guerra Comercial, el Brexit, la ralentización alemana, la incertidumbre política en España e Italia (la tregua en el país transalpino puede no durar mucho, tal como nos tiene acostumbrados) han marcado las caídas y rebotes de los principales índices del Viejo Continente, a pesar de los buenos resultados empresariales y valoraciones que se demuestran en algunas operaciones corporativas que están en marcha.
El Ibex está intentando consolidar los 9.000 puntos; si otras veces en esta sección se da especial importancia a los 9.200 no hay que descartar la psicología del número redondo. De hecho, y es un problema que presenta nuestro selectivo (además de lo bancarizado que está, aunque eso es otra cuestión), desde estos 9.000 hasta los 10.200 presenta una resistencia en cada 200 puntos. La parte buena es que por debajo los 8.600 son muy sólidos y solo se han perdido de forma muy puntual este verano de forma similar a como lo hizo a finales de 2018.
El nivel a consolidar ahora del EuroStoxx son los 3.500-3.570. De conseguirlo los 3.720 primero y los 3.830 después son dos objetivos muy realistas (sin descartar a largo plazo los 4.120); si no, los 3.320-3.240 deberían volver a ejercer de suelo.
El DAX alemán, a pesar de su problemática macroeconómica, está intentando consolidar los 12.300 puntos. De hacerlo podría ir a buscar los 13.000 primero y sus máximos históricos (16.300) después. Por el contrario, presenta un nivel de soporte muy sólido en 11.500.
La vuelta a la normalidad con el mercado en pleno apogeo tras las vacaciones de verano marcará si ganan los datos empresariales y se buscan resistencias o vencen los ruidos geopolíticos y se rompen soportes.