Artículo publicado día 14 de febrero en «El Económico», enlaces no incorporados al artículo original.
Los Bancos Centrales siguen siendo protagonistas
En esta sección se analizan con frecuencia la evolución y las perspectivas acerca de los tipos de interés, no en vano se trata de un dato macro que afecta directamente a los bolsillos de familias y empresas, tanto de forma directa (hipoteca, ahorros) como indirecta (impuestos). Por eso, los Bancos Centrales generan mucha expectación ante sus reuniones, previsiones y, por supuesto, decisiones.
Nos encontramos en un entorno de bajos tipos de interés, que incluso son negativos: algunos Gobiernos cobran intereses por endeudarse (ver gráfico), el Euribor está en negativo, por el ahorro “sin riesgo” los bancos no dan remuneración o repercuten al cliente (vía intereses negativos comisiones) el 0,50% que les cobra el BCE (Banco Central Europeo).
El objetivo de los Bancos Centrales no es otro que controlar la inflación y la política monetaria afecta (o debería afectar) a los precios: si se bajan los tipos de interés, las familias se endeudan barato (o no les vale la pena guardar su dinero a cambio de rentabilidad nula) y consumen más provocando aumento de demanda y, por tanto, subida de precios.
Los precios no suben
Actualmente no está pasando, los precios siguen siendo bajos, principalmente, por tres motivos: (i) la crisis sigue haciendo mella en muchas familias, (ii) la mano de obra en algunos países importadores es muy barata y, por tanto, se pueden vender productos baratos y (iii) muy relacionado al punto anterior, y, “gracias” al comercio electrónico los consumidores consiguen artículos a precios muy baratos.
Visto esto, parece que los tipos serán bajos durante muchísimo tiempo, sin embargo no es bueno para la salud de la economía. En las últimas semanas cuatro bancos centrales con mucha relevancia están alertando: tanto BCE como FED (Estados Unidos) han dicho que estas políticas no se pueden prolongar en el tiempo y, tanto el Banco Central de Suecia como el de Noruega han subido tipos varias veces estos meses y están revisando objetivos de inflación, algo que también podría hacer el BCE. Si que el mundo ha cambiado y que los precios estarán controlados, rebajarán sus objetivos y tendrán vía libre para subir tipos de interés.
Datos
2% El objetivo de inflación del BCE es “entorno” al 2%, el IPC armonizado de la Zona Euro es el 1,4%.
4 El Banco Central de Noruega ha subido tipos de interés 4 veces desde septiembre, dejándolo en el 1,50%.
10 En torno a 10 billones de dólares de deuda pública de todo el mundo están repercutiendo tipos de interés negativos.