Artículo publicado día 17 de mayo en «El Económico» (links no incorporados en el artículo original).
Se recrudece la guerra comercial
Parecía que las negociaciones entre Estados Unidos y China iban por buen caminoo y que llegaría la “Paz Comercial” en breve. Sin embargo todo se truncó la semana pasada cuando el Gobierno norteamericano anunció el fin de la suspensión de mantener aranceles en el 10% a productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares (textil, química, combustibles, materiales de construcción, y cereales) y empezar a gravarlos al 25%; abriendo la posibilidad de incrementarlos en otros 325.000 millones.
Parece ser que las nuevas hostilidades se deben a la propuesta de acuerdo enviada por China. En ésta se incluyen numerosos cambios respecto a lo hablado, entre ellos la no transcripción de acuerdos a leyes chinas, algo indispensable para las autoridades americanas que buscan garantías legales para el cumplimiento de lo acordado.
La reacción de China no se hizo esperar, y tras anunciar que estudiaría medidas, las ha puesto en práctica: también sube al 25% el tipo al que tributan productos importados desde los Estados Unidos por valor de 60.000 millones de dólares. En el momento de escribir este artículo no había sucedido, pero la amenaza americana sobre los 325.000 millones restantes es más que posible; especialmente teniendo en cuenta que el anuncio chino se produjo menos de 2 horas después de un twitt de Donald Trump que apremiaba al Gobierno chino para que no reaccionara.
Preguntas en el aire
Varias preguntas quedan en el aire ahora; la primera y más importante, si se descarta la paz total: las negociaciones siguen en marcha a pesar de todo, eso es una buena noticia. China tiene que perder mucho en esta batalla ya que imposibilitaría su objetivo de crecimiento del 6%; y Estados Unidos no saldría bien parado con rebajas de PIB que podrían alcanzar tres puntos.
Otra pregunta es saber cómo reaccionará la economía ante este nuevo desafío: ver situaciones como las del año pasado parecen complicadas, en parte porque las políticas monetarias de la Reserva Federal han cambiado en un año y pueden amortiguar algo el efecto negativo.
Todavía hay que esperar y ver si se produce un acuerdo, que seguro que será más lento al esperado por los más optimistas.
Datos:
100% Si EEUU incrementa al 25% los 325.000 millones de dólares que está estudiando, el 100% de las importaciones chinas tendrán este tipo de gravamen.
5,20% Las estimaciones, ante un aumento de gravámenes por parte de EEUU, es que China crezca en 2019 un 5,20% .
19% El mercado norteamericano es el mayor en cuanto a exportaciones para China, representa el 19% del total.